LITERATURA: Comentario literario sobre "La perla" de John Steinbeck

 


   La Perla es una novela del autor norteamericano John Steinbeck, la cual fue publicada en el año 1945 en la revista Woman´s home company, y luego en formato de libro en 1947. Este libro está basado en un cuento mexicano que el propio Steinbeck ya había mencionado en otro de sus trabajos. La historia sigue a Kino, un humilde pescador que tras un grave accidente donde su pequeño hijo termina siendo picado por un escorpión, decide utilizar el valor de una costosa perla que halló, para conseguir atención médica y una mejor vida para su familia, planes que se ven truncados cuando las personas de su entorno vecinal, intentan perseguirlo con el fin de arrebatarle el preciado objeto.

 

  Esta novela retrata las diferencias de  clases, la avaricia, el racismo y el egoísmo, temas universalmente conocidos dentro del trabajo literario de Steinbeck quien es considerado uno de los exponentes más brillantes del naturalismo en la literatura universal. Esta obra es tomada en cuenta como un trabajo menor en la vasta carrera del escritor, siendo incluso opacada por celebres novelas como Al este del Eden o la premiada Las uvas de la ira, pero sin embargo, eso no le quita calidad al texto, el cual brilla por la potencia de sus reflexiones y la crudeza con la que es retratado el sector marginal de las personas que vivían en Nuevo México a principios de 1900. La prosa es sencilla y ligera, pero resulta muy clara a la hora de describir las situaciones, lo cual hace que la lectura sea más inmediata sin hacer reparos en aspectos innecesarias, si bien tiene pocas páginas (no llega a las 160) su personaje principal está bien construido y su actuar no resulta forzado en lo absoluto, al contrario, Steinbeck nos presenta a un hombre pobre y trabajador que solo busca progresar para el bien de sus seres queridos, incluso sin reparar en las constantes discriminaciones que recibe, y es fácil allegarse a este sujeto desconocido debido a su carga tan humana. Sin embargo, la desgracia que lo rodea envuelve al lector en un constante espiral de angustia, frustración y dolor que no te deja soltar el libro hasta que no queden más palabras por leer.

 

 Esta es una novela dura en el más amplio sentido de la palabra, aún pasaron años desde la última vez que lo leí, y aún me cuesta superarlo. Si tuviera que recomendarlo lo haría para aquellas personas que resisten a la crueldad que la literatura puede ofrecer, porque lejos de hacer sufrir con una historia de amor prohibido, o un libro de épicas batallas, Steinbeck elige calar hasta lo más hondo de las entrañas lectoras por medio de una historia tan cruda como tristemente realista.

 

 

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