CINE: Tres películas esenciales en la filmografía de Ingrid Bergman.

 

Nacida un 29 de agosto de 1915, en Estocolmo, Suecia. Ingrid Bergman es, hoy en día, uno de los nombres más importantes de la historia del séptimo arte, prolífera interprete, comenzó su carrera a principios de la década de 1930 y a partir de allí no paro de brillar. Con un talento inigualable, una belleza sofisticada y una presencia imponente, Bergman es uno de los nombres femeninos más recordados y aclamados. Por eso, y con la intención de hacerle honor a tal estrella, en esta ocasión, recomiendo tres grandes cintas que forman parte de su vasta filmografía. 

1. Goodbye Again

Goodbye again (No me digas adiós, como se tituló en Argentina) es una cinta del año 1961, dirigida por el cineasta estadounidense Anatole Litvak. La historia sigue a Paula, una mujer que se encuentra en sus cuarentas y que trabaja como decoradora de interiores. Ella mantiene una relación amorosa con Roger, un hombre desatento que no desea casarse con ella, provocando que se sienta confundida y sola. Su vida cambia cuando conoce a Philip, el hijo de una clienta, un chico veinteañero y risueño que pone su atención en ella.

Esta película representa una relación entre personas con una amplia diferencia de edad, teniendo como imagen principal, la de una mujer que predomina en años, idea que incluso hoy en día no es muy común encontrar en la pantalla, y que en su momento supuso una novedad poco vista en el cine. Este aspecto puede cobrar más magnitud al tener en cuenta que Ingrid fue la interprete principal de la película, lo cual aporta a la imagen que presentamos de esta actriz en cuanto a lo revolucionaria que fue como persona tanto en su vida intima como en su carrera profesional. 

 

 Si lo vemos desde el punto de que la industria cinematográfica siempre mantuvo su absurda tradición de jubilar a las mujeres antes de que realmente fueran consideradas mayores, Ingrid Bergman mantuvo en pantalla un romance con un joven (el actor Anthony Perkins era 17 años menor), lo que más allá del final, muestra la libertad afectiva y natural que tiene una mujer, sin verse despechada o promiscua, ya que la cinta de Litvak se encarga de narrar sentimientos y necesidades básicas del ser humano en cuanto al amor y el deseo de no estar solos. Ésta es una película maravillosa y necesaria para recordar a Bergman.

2. Spellbound.

Spellbound es uno de los thrillers más recordados de Alfred Hitchcock. Estrenada en el año 1945, la película tiene como personaje principal a Constance, una doctora psiquiatra que intenta ayudar al nuevo director del hospital a recordar sucesos cruciales en su pasado. Esta película es uno de los grandes clásicos del cine, no solo por su calidad directiva y la participación de Salvador Dalí en el diseño de producción, sino porque es una de las películas que con el tiempo ha ayudado a inmortalizar la imágenes de dos grandes figuras del séptimo arte, como lo son Ingrid Bergman y Gregory Peck. 

  Es bien sabido que durante los años cuarenta, la representación de las mujeres en las películas se fue transformando, al otorgarles más participación, carácter y criterio personal, y todo esto es visto en su protagonista, quien por medio de su inteligencia recorre un camino de descubrimiento en busca de respuestas. La película es una cinta con ritmo ágil, es ingeniosa y creativa al moverse de un tema a otro sin perder el hilo argumental central, tiene romance, misterio, policial y por momentos hasta escenas que rozan el terror. Sin duda una de las mejores actuaciones de Ingrid y una cinta perfecta para comenzar a mirar clásicos o adentrarse en el cine de Hitchcock.

3. Höstsonaten.

Sonata de Otoño es una de esas cintas famosas por recoger inmensas figuras, el cual en este caso, fusiona la magia de tres talentos inigualables: el del director Ingmar Bergman, y el de las actrices Ingrid Bergman y Liv Ullmann. Esta película estrenada en el año 1978, toca un tema universalmente importante, como lo es las relaciones entre madres e hijas, sus lazos afectivos (o la falta de ellos) y los choques generacionales.

Esta película tiene como protagonista a Charlotte, una pianista de éxito que al volver experimenta un reencuentro con su hija Eva, a quien no veía hacía años debido a la atención a su carrera musical. Al principio la bienvenida es cálida, pero detrás de las sonrisas se esconden sentimientos y problemas no dichos ni resueltos que con el tiempo, comienzan a salir a la luz.

Sonata de Otoño es un melodrama familiar de esos que poseen largas discusiones y diálogos de índole emocional, donde el espectador conoce a los personajes por medio de la interacción puramente verbal, es una cinta donde el guion cumple un rol crucial más allá de cualquier otro aspecto, y en este caso, lo que hace es convertir esta sencilla historia en un combate interpretativo entre sus fabulosas protagonistas, ya que entre ambas actrices, se muestra un choque generacional que desborda talento a lo largo de la hora y media que dura la cinta. Si bien esta no es una historia que trasmita buenas vibras, y sí deje un sentimiento de amargura y soledad al terminarla, mantiene presente en la mente de quien la ve, la reflexión acerca de las relaciones que cada uno mantiene con sus propios padres y el peso que éstos tienen sobre la vida de uno.